Solana está entrando en una distensión estratégica con otras redes importantes de capa 1, con el objetivo de reemplazar el actual mosaico de canales de pago con un marco coherente cross-chain para instituciones.
Según un anuncio del 6 de noviembre, la Fundación Solana ha establecido una alianza formal con un grupo de sus principales competidores, incluyendo Polygon, TON, Sui y Monad, junto con el gigante de infraestructura Fireblocks, para formar el Consorcio de Pagos Blockchain, o BPC.
La coalición marca un alejamiento significativo del tribalismo ecosistémico típico que ha definido al sector. Su objetivo declarado es desarrollar colaborativamente un marco técnico y de cumplimiento unificado para abordar los dolores de cabeza de interoperabilidad que han impedido que el capital institucional fluya libremente a través de diferentes redes blockchain.
Solana y sus socios están apuntando directamente a una paradoja central dentro de la industria cripto. Mientras que las redes blockchain colectivamente liquidaron más de $15 billones en cadena en 2024 — una cifra que eclipsa el volumen combinado de Visa y Mastercard — esta actividad permanece aislada.
Para empresas e instituciones financieras, esto crea un panorama lleno de fricciones. Mover valor a través de diferentes cadenas a menudo implica navegar por un laberinto de estándares incompatibles, requisitos de cumplimiento variables y una falta de modelos de seguridad compartidos.
Solana y sus nuevos socios están haciendo una apuesta audaz: que la clave para desbloquear el próximo capítulo de los pagos digitales reside en la colaboración, no solo en la competencia. Su objetivo es estandarizar los datos de transacción, los protocolos de cumplimiento y las liquidaciones entre cadenas. Visualizan un futuro donde el valor digital se mueve entre blockchains tan fácilmente como la moneda fiat se mueve entre bancos hoy.
En última instancia, su marco compartido busca construir un puente entre el mundo innovador pero a menudo caótico de las redes públicas y las estrictas demandas de los proveedores de pagos tradicionales y los reguladores.
El consorcio tiene como objetivo proporcionar a las empresas un libro de reglas estándar y predecible para transferencias en cadena, mientras preserva la naturaleza descentralizada que da a estas blockchains su poder único.


